Los operadores no hacen nada para detener la robadera. No dicen que cada aparato tiene el código IMEI, con el cual se puede bloquear su uso para siempre. 

 

¿Por qué tanta robadera de celulares? Sencillo. Los ladrones les cambian la tarjeta SIM o chip, y los ponen a funcionar nuevamente. Los operadores no hacen nada al respecto. Lo que les interesa es facturar, sin importarles si quien lo hace es el dueño original o el ladrón, o alguien a quien el ladrón le vendió el aparato.

Pero hay una forma para que el ladrón no siga utilizando el aparato que se robó. Todos los móviles GSM (o sea los que tienen chip) tienen un registro de serie único, que no se repite en ningún teléfono a nivel mundial y que se llama código IMEI. Sobra decir que los operadores no lo tienen registrado.

Los dueños de los celulares pueden acceder al código IMEI marcando en su aparato *#06# (no hay que presionar otra tecla). Al marcar, aparece automáticamente el número del código exclusivo. Hay que anotarlo en lugar seguro, pero de fácil acceso.

En caso de robo, se llama al operador y se le da este código. Su celular quedará bloqueado completamente y aunque el ladrón cambie la tarjeta SIM o chip, no podrá encenderlo.

Si todo el mundo hiciera esto, se perdería el incentivo de robar celulares. Después de todo, ¿para qué robar un celular que nunca va a funcionar? Ya que por lo general no hay forma de recuperar un celular robado, por lo menos que quede la satisfacción de que el ladrón no lo podrá utilizar nunca más.