Según el Centro de Predicción del Clima, a mediados de octubre de 2011 las anomalías negativas en las temperaturas del Océano Pacífico ecuatorial permanecían débiles.

 

Lo primero que hay que decir es que La Niña actual está lejos de ser la de los mismos meses del año anterior. Lo segundo es que desde 1950 se han presentado cinco La Niña contiguas o seguidas (este fenómeno no es debido al calentamiento global). Tres de ellas más débiles que las primeras. Y ese parece ser el caso ahora.

Para el Centro de Predicción del Clima de Estados Unidos existe una probabilidad de 78% de que el fenómeno de La Niña se mantenga débil y un 22% de que las condiciones se tornen neutrales (o normales). El fenómeno de una La Niña débil duraría hasta diciembre-febrero, básicamente.

En el caso de Colombia es de esperar, entonces, un invierno relativamente fuerte, pero de ninguna manera con la intensidad de lluvias del de finales de 2010.

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