Chávez se reunió hace poco con Rafael Correa y Daniel Ortega para coordinar la forma como incidirán en la campaña presidencial de Colombia, en contra del candidato Juan Manuel Santos. De esas reuniones han salido toda clase de declaraciones de Chávez y Correa sobre la posibilidad de una guerra en caso de que Santos sea elegido Presidente. También la decisión de la Fiscalía de Ecuador de revivir un juicio a Santos por el ataque contra alias Raúl Reyes en territorio de ese país. Por último, la toma de una embarcación pesquera colombiana por parte de la marina de Nicaragua.
Todos son actos para mandarle el mensaje al electorado colombiano que sólo hostilidad existirá contra Colombia si Santos triunfa en las elecciones. Falta la manifestación por parte del Presidente de Bolivia Evo Morales, el otro miembro del ALBA, la que seguramente no se hará esperar
No se sabe qué resultado tendrá sobre el electorado colombiano este montaje, y las sorpresas adicionales que seguramente ya han programado los Presidentes del ALBA. Pero se trata, de todas maneras, de una burda injerencia en la política interna colombiana dirigida a neutralizar a Colombia como país que se opone a los planes expansionistas de Chávez.
Todos son actos para mandarle el mensaje al electorado colombiano que sólo hostilidad existirá contra Colombia si Santos triunfa en las elecciones. Falta la manifestación por parte del Presidente de Bolivia Evo Morales, el otro miembro del ALBA, la que seguramente no se hará esperar
No se sabe qué resultado tendrá sobre el electorado colombiano este montaje, y las sorpresas adicionales que seguramente ya han programado los Presidentes del ALBA. Pero se trata, de todas maneras, de una burda injerencia en la política interna colombiana dirigida a neutralizar a Colombia como país que se opone a los planes expansionistas de Chávez.