Centros meteorológicos coinciden en que el fenómeno El Niño ha empezado a debilitarse y que su impacto terminará hacia mediados del año.
Para el Australian Bureau of Meteorology el fenómeno alcanzó su pico en diciembre de 2009 y lo más seguro es que termine en junio de 2010. Según el U.S. Climate Prediction Center, si bien un El Niño significativo persistió a través del Océano Pacífico ecuatorial durante enero de 2010, las temperaturas en la superficie del mar cayeron al final de ese mes, lo que sugiere una terminación de las anomalías hacia abril-junio.
El debilitamiento de El Niño es una buena noticia para Colombia y Venezuela que actualmente están padeciendo los efectos de un verano más intenso del acostumbrado, y para algunas regiones de Ecuador, Perú, Bolivia, Brasil y Argentina, que por esa causa están enfrentando un exceso de lluvias.
Ahora bien, la desaparición de El Niño hacia mediados de 2010 se traducirá en una muy activa temporada de huracanes en el Atlántico y Caribe. Como se sabe, la temporada de estos huracanes empieza en junio 1 y concluye en noviembre 30. Tal como sucedió en 2009, en la temporada cuando se inicia un El Niño se aplacan los huracanes; pero así también, en la temporada que sigue al desvanecimiento de este fenómeno se intensifican los huracanes.
De manera que 2010 sería uno de numerosas tormentas y huracanes en el Atlántico y Caribe. Por favor tomar nota de este hecho los histéricos del calentamiento global y los medios de comunicación sensacionalistas. Los huracanes de este año se originarán en un fenómeno climatológico normal, que es recurrente entre cada 2 a 5 años, y que se ha presentado desde épocas inmemoriales.
El debilitamiento de El Niño es una buena noticia para Colombia y Venezuela que actualmente están padeciendo los efectos de un verano más intenso del acostumbrado, y para algunas regiones de Ecuador, Perú, Bolivia, Brasil y Argentina, que por esa causa están enfrentando un exceso de lluvias.
Ahora bien, la desaparición de El Niño hacia mediados de 2010 se traducirá en una muy activa temporada de huracanes en el Atlántico y Caribe. Como se sabe, la temporada de estos huracanes empieza en junio 1 y concluye en noviembre 30. Tal como sucedió en 2009, en la temporada cuando se inicia un El Niño se aplacan los huracanes; pero así también, en la temporada que sigue al desvanecimiento de este fenómeno se intensifican los huracanes.
De manera que 2010 sería uno de numerosas tormentas y huracanes en el Atlántico y Caribe. Por favor tomar nota de este hecho los histéricos del calentamiento global y los medios de comunicación sensacionalistas. Los huracanes de este año se originarán en un fenómeno climatológico normal, que es recurrente entre cada 2 a 5 años, y que se ha presentado desde épocas inmemoriales.