De hecho, a finales de 2009 la producción de petróleo podría aproximarse a los 700.000 barriles diarios, frente a los 588.000 barriles diarios de 2008. Y según el director de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) Armando Zamora, en uno o dos años se alcanzarían 800.000 barriles diarios, un nivel que no se presentaba desde los años 90, cuando entró en producción el campo de Cusiana.
Zamora hizo estas declaraciones con motivo del lanzamiento de la Colombia Open Round 2010. En esta ronda se proporcionará información preliminar sobre 170 bloques en los cuales compañías de todo el planeta adquirirán derechos para explorar y producir petróleo y gas natural. Se incluyen zonas en el mar abierto de las Islas de San Andrés y en la Costa Pacífica en el departamento de Chocó.
En septiembre de 2009, el Presidente Álvaro Uribe señaló que tenía confianza que Colombia lograría eventualmente niveles de producción cercanos a los 1.6 millones de barriles diarios, lo que la convertiría en una potencia petrolera mundial. Este optimismo se basa en las perspectivas que hay en relación con la intensa actividad exploratoria actual, con el aumento de la producción de los campos existentes, y con el gran interés que reina entre las compañías extranjeras petroleras de comprometer recursos adicionales en un país respetuoso y serio en el cumplimiento de sus compromisos, como lo es Colombia.
Zamora hizo estas declaraciones con motivo del lanzamiento de la Colombia Open Round 2010. En esta ronda se proporcionará información preliminar sobre 170 bloques en los cuales compañías de todo el planeta adquirirán derechos para explorar y producir petróleo y gas natural. Se incluyen zonas en el mar abierto de las Islas de San Andrés y en la Costa Pacífica en el departamento de Chocó.
En septiembre de 2009, el Presidente Álvaro Uribe señaló que tenía confianza que Colombia lograría eventualmente niveles de producción cercanos a los 1.6 millones de barriles diarios, lo que la convertiría en una potencia petrolera mundial. Este optimismo se basa en las perspectivas que hay en relación con la intensa actividad exploratoria actual, con el aumento de la producción de los campos existentes, y con el gran interés que reina entre las compañías extranjeras petroleras de comprometer recursos adicionales en un país respetuoso y serio en el cumplimiento de sus compromisos, como lo es Colombia.