O de Allah (Dios de los árabes), como quiera llamársele. Así lo dijo en una declaración el ministro del petróleo de Arabia Saudita. Así lo confirma un reciente informe secreto de la OPEC.
Ali Al-Naimi, en una entrevista con la cadena CNBC, dijo textualmente: “Nadie puede fijar el precio del petróleo. Eso depende de Alá”. Bueno saber que ahora estos temas se definen en el cielo. Pero en realidad el fondo del mensaje del ministro saudí es que es poco lo que la OPEC puede hacer para mantener precios artificialmente altos.
Después de esta declaración, el Wall Street Journal conoció el borrador secreto de un informe técnico presentado al interior de la OPEC en el que se predice que en el escenario mas optimista el precio internacional del petróleo llegaría a US$76 el barril al final de los próximos 10 años, o sea en 2025.
El pesimismo de la OPEC en relación con el precio del crudo tiene que ver con sus preocupaciones sobre el creciente papel de los productores americanos en el mercado (especialmente los de Estados Unidos y Canadá). Considera el informe que estos productores podrán eventualmente competir a precios mas bajos que los actuales cercanos a $60 barril.
Aparte del margen para rebajar costos que tienen los productores de la nueva tecnología (explotación con la técnica del “fracking”), lo cierto es que estos pozos, a diferencia de los tradicionales, no necesitan de una producción continua. Se puede suspender su producción sin que se pierda el pozo. Y se puede reanudar si los precios suben y la rentabilidad así lo justifica.
En otras palabras, los productores americanos, que son muchos y de todos los tamaños, actuarían de ahora en adelante como los nuevos reguladores de los precios internacionales del petróleo, aumentando la producción cuando ellos se incrementen y reduciéndola cuando ellos caigan.
Después de esta declaración, el Wall Street Journal conoció el borrador secreto de un informe técnico presentado al interior de la OPEC en el que se predice que en el escenario mas optimista el precio internacional del petróleo llegaría a US$76 el barril al final de los próximos 10 años, o sea en 2025.
El pesimismo de la OPEC en relación con el precio del crudo tiene que ver con sus preocupaciones sobre el creciente papel de los productores americanos en el mercado (especialmente los de Estados Unidos y Canadá). Considera el informe que estos productores podrán eventualmente competir a precios mas bajos que los actuales cercanos a $60 barril.
Aparte del margen para rebajar costos que tienen los productores de la nueva tecnología (explotación con la técnica del “fracking”), lo cierto es que estos pozos, a diferencia de los tradicionales, no necesitan de una producción continua. Se puede suspender su producción sin que se pierda el pozo. Y se puede reanudar si los precios suben y la rentabilidad así lo justifica.
En otras palabras, los productores americanos, que son muchos y de todos los tamaños, actuarían de ahora en adelante como los nuevos reguladores de los precios internacionales del petróleo, aumentando la producción cuando ellos se incrementen y reduciéndola cuando ellos caigan.