En 2018 las ventas del comercio minorista aumentaron 6,2%, lo que se compara favorablemente con la caída de 1,9% que se registró en 2017.
Los sectores de mayor crecimiento fueron: vehículos automotores y motocicletas (+16,1%); equipo informática y telecomunicaciones (+15,3%); productos aseo hogar (+11,3%); bebidas alcohólicas y tabaco (+11%); artículos uso doméstico (+8,1%); alimentos y bebidas no alcohólicas (+7,5%); prendas de vestir y textiles (+4,5%); y electrodomésticos y muebles (+3,2%).
Los sectores con crecimientos menores a los del PIB fueron: productos aseo personal y cosméticos (+2,6%); calzado y artículos de cuero (+2,5%); combustibles vehículos automotores (+2,1%); ferretería, vidrios y pintura (+2%); papelería, libros y periódicos (+0,6%); productos farmacéuticos (–0,9%); y autopartes y accesorios (–3,7%).
En 2018 se revirtió la tendencia negativa que traía el comercio minorista desde mediados de 2016. La disminución de las tasas de interés, una relativa estabilidad cambiaria, y políticas agresivas de reducción de inventarios por parte de los empresarios del sector, contribuyeron a una recuperación que se espera continuará sin grandes altibajos en 2019.