Después de negociar con República Dominicana la deuda de este país con PDVSA, se apresta a concretar una negociación similar con Jamaica.
Venezuela obtuvo de la República Dominicana US$1.900 millones correspondientes a una deuda de ese país que ascendía a US$4.100 millones por concepto de la compra de petróleo a PDVSA.
Con Jamaica hay una deuda similar, estimada por JP Morgan Chase en US$3.800 millones. El ministro de Finanzas de ese país sugirió que podría hacerse un arreglo similar al de República Dominicana. Esto le daría al quebrado gobierno de Venezuela un respiro adicional de caja de US$1.800 millones.
Las condiciones de financiación de estas ventas de petróleo de PDVSA a las islas del Caribe y a países de Centroamérica fueron en condiciones de pago de muy largo plazo (25 años) y a tasas de interés favorables (entre 1% y 2%). República Dominicana y Jamaica fueron los mas favorecidos con estas exportaciones subsidiadas, aparte de Cuba, Nicaragua y El Salvador.
Con Jamaica hay una deuda similar, estimada por JP Morgan Chase en US$3.800 millones. El ministro de Finanzas de ese país sugirió que podría hacerse un arreglo similar al de República Dominicana. Esto le daría al quebrado gobierno de Venezuela un respiro adicional de caja de US$1.800 millones.
Las condiciones de financiación de estas ventas de petróleo de PDVSA a las islas del Caribe y a países de Centroamérica fueron en condiciones de pago de muy largo plazo (25 años) y a tasas de interés favorables (entre 1% y 2%). República Dominicana y Jamaica fueron los mas favorecidos con estas exportaciones subsidiadas, aparte de Cuba, Nicaragua y El Salvador.
Anteriormente Citgo, la filial de PDVSA con operaciones en Estados Unidos, había colocado bonos por US$1.500 millones a cinco años y a una costosa tasa de interés de 12,1%. Adicionalmente, en lo que se considera un acto de desesperación, Citgo consiguió un préstamo por US$1.300 millones en momentos de baja rentabilidad por la caída de los precios internacionales del petróleo. En ambas operaciones, los acreedores asumirían el control total de la compañía en caso de cesación de pagos.
Y se rumora que el gobierno venezolano está planeando realizar una operación de swap con las reservas de oro por US$1.500 millones.
Pero así como ingresan los recursos provenientes de la liquidación de activos financieros, así también se esfuman en medio de un manejo cuya característica principal son unos significativos desequilibrios macroeconómicos, niveles de reservas internacionales ínfimas y un endeudamiento público insostenible para un país que cada vez produce menos de todo.
De ahí que varios analistas consideren que Venezuela podría entrar en cesación de pagos hacia 2016 e incluso a finales de 2015, especialmente si se mantienen los bajos precios internacionales del petróleo, que es en la actualidad su única fuente de ingresos de divisas.
Y se rumora que el gobierno venezolano está planeando realizar una operación de swap con las reservas de oro por US$1.500 millones.
Pero así como ingresan los recursos provenientes de la liquidación de activos financieros, así también se esfuman en medio de un manejo cuya característica principal son unos significativos desequilibrios macroeconómicos, niveles de reservas internacionales ínfimas y un endeudamiento público insostenible para un país que cada vez produce menos de todo.
De ahí que varios analistas consideren que Venezuela podría entrar en cesación de pagos hacia 2016 e incluso a finales de 2015, especialmente si se mantienen los bajos precios internacionales del petróleo, que es en la actualidad su única fuente de ingresos de divisas.