Durante septiembre de 2012 la tendencia que apunta a un fenómeno climatológico de El Niño débil se atrasó en varios indicadores oceánicos y atmosféricos.
Tal es el diagnóstico del Centro de Predicciones Climáticas de Estados Unidos. Las anomalías relacionadas con las temperaturas de la superficie del mar Ecuatorial y las relacionadas con el contenido calórico del Océano Pacífico se debilitaron durante el mes pasado. En el balance final tanto los indicadores de la atmósfera como del océano indican condiciones que están en el límite entre lo normal y el advenimiento de un El Niño débil.
En resumen, las probabilidades de que se desarrolle un El Niño catastrófico han desaparecido casi por completo. Hay un 50% de probabilidades de que eventualmente surja un El Niño débil a finales del año y comienzos del próximo, pero en dado caso, sin grandes alteraciones en los regímenes de lluvia tanto en Colombia como en los países vecinos.
En resumen, las probabilidades de que se desarrolle un El Niño catastrófico han desaparecido casi por completo. Hay un 50% de probabilidades de que eventualmente surja un El Niño débil a finales del año y comienzos del próximo, pero en dado caso, sin grandes alteraciones en los regímenes de lluvia tanto en Colombia como en los países vecinos.