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Pizano y sus filiales perdieron impulso, en tanto que Cotopaxi Colombia sobresalió por su dinamismo e igualó en el segundo lugar a Tablemac.
 
En 2009, las ventas de Pizano ascendieron a $140.778 millones (aproximadamente US$65 millones) y disminuyeron 16,7% frente al año anterior. A su vez, las de su filiales fueron las siguientes: Mantesa $21.673 millones (aproximadamente US$10 millones) y –10,9%; Maderas del Darién $20.832 millones (aproximadamente US$10 millones) y 3,3%; y Monterrey Forestal $5.228 millones (aproximadamente US$2 millones) y –41,6%.  

Posteriormente se ubicaron Tablemac con ventas de $82.169 millones (aproximadamente US$38 millones) y un descenso de 3,8%; y Cotopaxi Colombia con $82.006 millones (aproximadamente US$38 millones) y un crecimiento de 25,3%.

Más atrás se posicionaron Masisa Colombia con ventas de $44.071 millones (aproximadamente US$20 millones) y una reducción de 21,9% en relación con 2008; Madeflex con $22.916 millones (aproximadamente US$11 millones) y –19%; IMA $22.608 milllones (aproximadamente US$10 millones) y –21,6%; Triplex Acemar $13.479 millones (aproximadamente US$6 millones) y –11,8%; y Maderas Serrano Gómez $10.475 millones (aproximadamente US$5 millones) y 23,8%.  

Durante 2009 este sector se contrajo a raíz de la recesión por la que atravesó la economía colombiana y muy especialmente, por la caída de la construcción urbana. Para 2010 se proyecta un escenario menos adverso por la recuperación económica, si bien solamente hasta 2011 se prevé una reactivación en firme de la edificación tanto de vivienda como la de otros destinos.