Y agregó: “Francia no tiene unos presupuestos equilibrados desde 1980”. Después de eso dijo que el crecimiento económico de su país en 2012 será inferior al previsto, que se necesitan hacer grandes economías para salvar su modelo social, y que sin esos sacrificios la credibilidad internacional de Francia estará en peligro.
Un poco tarde este reconocimiento de Sarkozy, que es el mismo de la gran mayoría de los países de la Comunidad Europea. Lo que no reconoce Sarkozy, pero que es el fondo de la cuestión, es que es precisamente el modelo social de su país el que no es viable.
Un modelo en el cual se sobre tributa, se sobre regula, se sobre subsidia, y donde tanto el sector público como el privado se sobre expanden a base de deuda, termina eventualmente en la bancarrota.
El modelo social demócrata europeo (el mismo que ha adoptado Estados Unidos más recientemente) es el paraíso de las clases políticas, mientras dura. Crea un entorno de permanente festín en el manejo del gasto público. De una alegre repartición de recursos ajenos. De "comisiones", regalos y beneficios a numerosos grupos de la población, sin contraprestación alguna en términos de esfuerzo y resultados.
Ciertamente un paraíso la vida de los políticos bajo el modelo social demócrata. Son responsables por lo bueno inicial y pueden echarle la culpa de los terribles males que sus políticas al final de cuentas acarrean, al “capitalismo”, o al “1%” de la población más rica, o a “wall street”, o a la mano de obra barata de los “países emergentes”, o a cualquier otra causa por el estilo. Lo importante es que la culpa no se relacione con su conducta, ni con el modelo político que les ha proporcionado tan extendido y cómodo poder.
(Advertencia: lanota.com sólo utiliza este nombre. No tiene relación alguna con portales o empresas que emplean la palabra lanota en otras combinaciones de nombres).