La petrolera colombiana mantiene un plan de expansión consecuente con precios internacionales del petróleo mucho más alto que los actuales.
De hecho, a Ecopetrol le está tocando asumir compromisos no anticipados. Por ejemplo, la suiza Glencore, su socia con el 51% en el proyecto de ampliación de la refinería de Cartagena (Reficar), está argumentando que en las condiciones actuales de los mercados internacionales no es posible conseguir crédito para financiar el proyecto. La inversión es de US$2.400 millones para aumentar la capacidad de refinación de 75.000 a 140.000 barriles diarios.
Por otro lado, Ecopetrol llegó a un acuerdo con anglo australiana BHP Billinton para aumentar su participación de 25% a 50% en la exploración de los bloques Fuerte Norte y Fuerte Sur en el Caribe colombiano. Se trata de un área en mar abierto de 954.000 hectáreas.
Ambas noticias son un claro indicio de que a los actuales precios internacionales del crudo y con la crisis económica global, varios inversionistas grandes están en retirada. Y que a Ecopetrol le tocará llenar el vacío en proyectos ya en marcha. Sin embargo, continúa con sus planes iniciales de inversión como si nada. Fue así como concretó la compra de Petro-Tech Peruana, en sociedad por mitades con Korea National Oil. El valor total de la operación fue de US$900 millones.
La empresa peruana pertenecía a Offshore International Group de Houston (Estados Unidos). Produce 12.500 barriles diarios de crudo y el equivalente a 7.158 barriles de petróleo en gas natural. Petro-Tech también posee 10 bloques para explorar. El plan inmediato es perforar en dos de esos bloques que quedan en mar abierto peruano, con la meta de aumentar la producción a 45.000 barriles hacía 2015.
La viabilidad de estas inversiones y el riesgo que se asume con ellas es muy distinto hoy en día que cuando Ecopetrol diseñó su plan de expansión con base en un precio del petróleo era el triple del actual. Todas las principales compañías del mundo petrolero están en proceso de revaluar y recortar sus inversiones. Ecopetrol, en cambio, sigue imperturbable, como si el entorno internacional fuera el mismo de hace ocho meses.
Por otro lado, Ecopetrol llegó a un acuerdo con anglo australiana BHP Billinton para aumentar su participación de 25% a 50% en la exploración de los bloques Fuerte Norte y Fuerte Sur en el Caribe colombiano. Se trata de un área en mar abierto de 954.000 hectáreas.
Ambas noticias son un claro indicio de que a los actuales precios internacionales del crudo y con la crisis económica global, varios inversionistas grandes están en retirada. Y que a Ecopetrol le tocará llenar el vacío en proyectos ya en marcha. Sin embargo, continúa con sus planes iniciales de inversión como si nada. Fue así como concretó la compra de Petro-Tech Peruana, en sociedad por mitades con Korea National Oil. El valor total de la operación fue de US$900 millones.
La empresa peruana pertenecía a Offshore International Group de Houston (Estados Unidos). Produce 12.500 barriles diarios de crudo y el equivalente a 7.158 barriles de petróleo en gas natural. Petro-Tech también posee 10 bloques para explorar. El plan inmediato es perforar en dos de esos bloques que quedan en mar abierto peruano, con la meta de aumentar la producción a 45.000 barriles hacía 2015.
La viabilidad de estas inversiones y el riesgo que se asume con ellas es muy distinto hoy en día que cuando Ecopetrol diseñó su plan de expansión con base en un precio del petróleo era el triple del actual. Todas las principales compañías del mundo petrolero están en proceso de revaluar y recortar sus inversiones. Ecopetrol, en cambio, sigue imperturbable, como si el entorno internacional fuera el mismo de hace ocho meses.