El índice de compras empresariales (HSBC PMI) cayó en abril de 2013 mas allá de lo previsto por los analistas. Un baldado de agua fría a expectativas de una aceleración de la economía de ese país.

 

El dato de abril fue 50,5, por debajo de 51,6 de marzo y de las expectativas que se tenían de 51,5. Un valor del índice superior a 50 muestra expansión y uno menor a 50 indica contracción. Esta información llega después del dato de aumento del PIB de 7,7% para el primer trimestre de este año y que también estuvo por debajo de lo esperado por los expertos.

Estas cifras coinciden con una contracción de las exportaciones chinas luego de un rebote en el mes anterior, lo que sugiere una debilidad de la demanda externa. No se prevé en los próximos meses un cambio en este escenario dado el estancamiento que se observa en las economías de la Unión Europea y el lento crecimiento que se insinúa en Estados Unidos.

Según lo reporta la agencia Reuters, el Ministerio de Industria de China indicó que actualmente las compañías no están en disposición de invertir dada la falta de dinamismo de la demanda externa y la subutilización actual de su capacidad instalada.

En este entorno global incierto e inestable, con una anémica demanda externa por sus producto, lo mas probable es que la economía de China crezca 7,5% en 2013 o incluso menos, en lugar del 8% proyectado por el Fondo Monetario Internacional, lo cual tendría un impacto negativo sobre los precios internacionales de los distintos productos básicos que exporta América Latina.