El grupo posee unos pasivos muy concretos, pero no hay mucha claridad sobre el verdadero valor de sus activos y por lo tanto de su patrimonio.
Se tiene una información relativamente completa del cierre contable de 2011 y muy fragmentaria para 2012. A junio 30 los pasivos totales del grupo ascendieron a $250.652 millones (aproximadamente US$133 millones). Dentro de estos pasivos sobresalen obligaciones financieras de corto plazo por $87.112 millones (aproximadamente US$46 millones) y unos bonos con vencimiento en marzo de 2014 por US$120.000 millones (aproximadamente US$63 millones).
Ahora bien, ¿cuáles son los activos en manos del grupo para respaldar estos pasivos? Entre los activos corrientes sobresalen por lejos los tres siguientes renglones: participación en fondos y carteras por $126.741 millones (aproximadamente US$67 millones), derechos de recompra de inversiones (repos) por $74.164 millones (aproximadamente US$39 millones), y derivados por $59.578 millones (aproximadamente US$32 millones). Y entre los activos no corrientes lo significativo es el renglón de inversiones permanentes por US$221.160 millones (aproximadamente US$117 millones).
Las inversiones permanentes son básicamente las participaciones que posee el grupo en sus filiales, dentro de las cuales la mas valiosa era la comisionista cuyo valor patrimonial hoy en día, después de la intervención de la Superintendencia Financiera, es cero o incluso negativo. Las otras filiales a las que la contabilidad le asigna algún valor es Interbolsa SAI (Sociedad Administradora de Inversión), Interbolsa Soluciones de Vivienda, Interbolsa Panamá e Interbolsa Participaciones (Brasil). Luego de los eventos recientes es difícil no concluir que los valores patrimoniales de estas sociedades también se han visto negativamente afectados.
Por otro lado, las participaciones en fondos y carteras se refieren básicamente a fondos administrados por el grupo dentro de los cuales se destaca uno llamado “Fondo de Capital Privado Interbolsa Inversiones” que arrancó en 2011. Existen dudas sobre las valoraciones tanto de este renglón como sobre el de los derechos de recompra de inversiones (repos) y el de los derivados.
Es poco lo que se puede adicionar sobre la compleja situación que enfrenta el Grupo Interbolsa sin una actualización de su información contable y sin que se sepa cuál es el verdadero respaldo con que dispone para atender sus diferentes obligaciones. Y muy especialmente lo relacionado con el valor real de sus activos corrientes, luego de la evidente desvalorización que han sufrido sus activos no corrientes representados en sus inversiones permanentes.
Ahora bien, ¿cuáles son los activos en manos del grupo para respaldar estos pasivos? Entre los activos corrientes sobresalen por lejos los tres siguientes renglones: participación en fondos y carteras por $126.741 millones (aproximadamente US$67 millones), derechos de recompra de inversiones (repos) por $74.164 millones (aproximadamente US$39 millones), y derivados por $59.578 millones (aproximadamente US$32 millones). Y entre los activos no corrientes lo significativo es el renglón de inversiones permanentes por US$221.160 millones (aproximadamente US$117 millones).
Las inversiones permanentes son básicamente las participaciones que posee el grupo en sus filiales, dentro de las cuales la mas valiosa era la comisionista cuyo valor patrimonial hoy en día, después de la intervención de la Superintendencia Financiera, es cero o incluso negativo. Las otras filiales a las que la contabilidad le asigna algún valor es Interbolsa SAI (Sociedad Administradora de Inversión), Interbolsa Soluciones de Vivienda, Interbolsa Panamá e Interbolsa Participaciones (Brasil). Luego de los eventos recientes es difícil no concluir que los valores patrimoniales de estas sociedades también se han visto negativamente afectados.
Por otro lado, las participaciones en fondos y carteras se refieren básicamente a fondos administrados por el grupo dentro de los cuales se destaca uno llamado “Fondo de Capital Privado Interbolsa Inversiones” que arrancó en 2011. Existen dudas sobre las valoraciones tanto de este renglón como sobre el de los derechos de recompra de inversiones (repos) y el de los derivados.
Es poco lo que se puede adicionar sobre la compleja situación que enfrenta el Grupo Interbolsa sin una actualización de su información contable y sin que se sepa cuál es el verdadero respaldo con que dispone para atender sus diferentes obligaciones. Y muy especialmente lo relacionado con el valor real de sus activos corrientes, luego de la evidente desvalorización que han sufrido sus activos no corrientes representados en sus inversiones permanentes.