Ha sido la inflación mas baja desde 2009. Este desempeño le proporciona al gobierno margen de maniobra para emprender políticas monetarias expansionistas.
Esto último es lo que ha hecho la Junta Directiva del Banco de la República desde julio del año pasado cuando empezó a reducir la tasa de interés. Sin duda el renglón que mas contribuyó a la caída de la inflación en 2012 fue el de alimentos. Hay que tener presente que el buen comportamiento de este renglón en los últimos cuatro meses de 2012 se originó en parte en la circunstancia de que durante los últimos cuatro meses de 2011, que es la base de comparación, la inflación de alimentos se disparó debido a fenómenos climatológicos adversos.
O sea que el entusiasmo en relación con los resultados recientes de la inflación hay que matizarlo un tanto. Sin embargo, es importante también señalar que renglones como el de vivienda, transporte y comunicaciones registraron una tendencia favorable a lo largo de 2012.
Si a lo anterior se agrega un aumento por decreto del salario mínimo que aplicará para 2013 de apenas 4,02%, así como una relativa fortaleza del peso, se llega a la conclusión que el año nuevo arranca con unas expectativas inflacionarias y de aumentos de costos de producción bajo control.
En medio de este entorno y ya sin incertidumbre en relación con las reglas de juego luego de la aprobación de la reforma tributaria por parte del Congreso, hay bases para pensar que la expansión de la economía interna podría amortiguar el eventual desenvolvimiento negativo que se espera de la economía global.
O sea que el entusiasmo en relación con los resultados recientes de la inflación hay que matizarlo un tanto. Sin embargo, es importante también señalar que renglones como el de vivienda, transporte y comunicaciones registraron una tendencia favorable a lo largo de 2012.
Si a lo anterior se agrega un aumento por decreto del salario mínimo que aplicará para 2013 de apenas 4,02%, así como una relativa fortaleza del peso, se llega a la conclusión que el año nuevo arranca con unas expectativas inflacionarias y de aumentos de costos de producción bajo control.
En medio de este entorno y ya sin incertidumbre en relación con las reglas de juego luego de la aprobación de la reforma tributaria por parte del Congreso, hay bases para pensar que la expansión de la economía interna podría amortiguar el eventual desenvolvimiento negativo que se espera de la economía global.