El precio de la acción de Citigroup continuó en picada luego de que se conociera que sus pérdidas en el cuarto trimestre serían superiores a las inicialmente estimadas.

 

Se espera que Citigroup reporte unas pérdidas de al menos US$10.000 millones en el último trimestre de 2008, con lo cual la pérdida acumulada del año pasado ascendería a más de US$20.000 millones. Por otro lado, en un intento por levantar capital, y minimizar contablemente las pérdidas, Citi está en conversaciones con Morgan Stanley para venderle Smith Barney, lo que haría al comprador la firma comisionista más grande del mundo.

Aparte de lo anterior, el ex secretario del Tesoro Robert Rubin, renunció a su puesto de miembro principal de la Junta Directiva. Rubin es considerado como uno de los diseñadores de la estrategia del Citi en los últimos diez años y, por lo tanto, es culpado del fracaso reciente. Con esa estrategia el banco estaba llamado a ser un "supermercado" de servicios financieros. 

 

Es de anotar que Citi recibió una capitalización directa del Tesoro por US$45.000 millones y cerca de US$250.000 millones de garantía por deuda tóxica. Y hay dudas de que ese esfuerzo, que en últimas es de los contribuyentes de Estados Unidos, sea suficiente para sacar adelante al banco.

La difícil situación por la cual atraviesa el Citi llevaría a la negociación de otros activos del banco, no solamente en Estados Unidos sino también en el resto del mundo. La venta de Smith Barney sería un paso en esa dirección.