En 2017 la producción manufacturera cayó 0,6% frente a 2016, lo que constituye su peor desempeño en los últimos cuatro años.
En 2016 el crecimiento de la producción maufacturera fue de 3,5%, mientras que en 2015 y 2014 fue de 0,9% y 1.5%, respectivamente.
En 2017 los sectores de la industria con mayores aumentos de la producción fueron: productos de caucho (+9,4%); aceites y grasas vegetales y animales (+8,6%); productos de molinería y derivados (+6,8%); químicas básicas y sus productos (+5,1%); refinación de petróleo (4,9%); papel, cartón y sus productos (+4,4%); hierro y acero (+3,9%); otros productos alimenticios (+2,7%); y autopartes y accesorios para vehículos (+2,3%).
Los sectores con la mayor disminución en la producción fueron: metales preciosos y no ferrosos (–25%); vehículos automotores (–14,7%); artículos de viaje y bolsos de manos en cuero (–14,4%); carrocerías para vehículos (–12,5%); maquinaria y equipo (–11,1%); confecciones de prendas de vestir (–8,6%); textiles (–8,2%); curtido de cueros (–8,1%); muebles y colchones (–5,6%); productos elaborados de metal (–5,1%); elaboración de bebidas (–4,5%); actividades de impresión (–3,9%); jabones, detergentes y perfumes (–3,8%); cemento (–3,7%); madera y sus productos (–3,5%); y aparatos y equipo eléctrico (–3,1%).
De los sectores restantes solamente cuatro tuvieron un desempeño positivo, en tanto que nueve contabilizaron descensos en la producción.
En 2018, la recuperación de los mercados de países vecinos (con la excepción de Venezuela), así como un mayor crecimiento de la economía global y un mas dinámico desempeño de la demanda interna, podrían contribuir a que el sector manufacturero recobre tasas positivas de crecimiento.
Los sectores con la mayor disminución en la producción fueron: metales preciosos y no ferrosos (–25%); vehículos automotores (–14,7%); artículos de viaje y bolsos de manos en cuero (–14,4%); carrocerías para vehículos (–12,5%); maquinaria y equipo (–11,1%); confecciones de prendas de vestir (–8,6%); textiles (–8,2%); curtido de cueros (–8,1%); muebles y colchones (–5,6%); productos elaborados de metal (–5,1%); elaboración de bebidas (–4,5%); actividades de impresión (–3,9%); jabones, detergentes y perfumes (–3,8%); cemento (–3,7%); madera y sus productos (–3,5%); y aparatos y equipo eléctrico (–3,1%).
De los sectores restantes solamente cuatro tuvieron un desempeño positivo, en tanto que nueve contabilizaron descensos en la producción.
En 2018, la recuperación de los mercados de países vecinos (con la excepción de Venezuela), así como un mayor crecimiento de la economía global y un mas dinámico desempeño de la demanda interna, podrían contribuir a que el sector manufacturero recobre tasas positivas de crecimiento.