La economía colombiana se estancó en 2023. La causa central de tan precario desempeño fue el desplome de la inversión. Año completo cayó 24,8%. En el último trimestre su disminución fue 27,2%.
Datos preliminares indican que la contracción del componente privado de la inversión fue mayor al superar 30%. La pregunta para el actual gobierno es muy simple: ¿de qué se trata su cuento? ¿Vivir en una permanente incertidumbre?
Arremeter con palabras y hechos contra quienes crean riqueza, aumentar considerablemente impuestos y promover un estatismo trasnochado, estigmatizar a distintos sectores, amenazar a los colombianos con “rupturas institucionales”, movilizar a hordas de adeptos en contra de la Corte Suprema de Justicia para presionar un fallo, hacerse el de la vista gorda para no enfrentar a la delincuencia, derrochar a la lata los recursos públicos, la lista es interminable.
Sin inversión la economía simplemente seguirá estancada o entrará en una recesión, ahí no hay de otra. Actualmente no hay un solo sector en donde exista un mínimo entusiasmo inversionista. Y cómo puede haberlo con un Presidente hostil y un gobierno desarticulado.