Lástima que sean negativos. Es el único país de América Latina cuya economía se contrajo en 2010 y por lejos, el de la inflación más alta.
En el tercer trimestre de 2010 la economía venezolana se contrajo 0,4% en relación con igual período del año anterior. Durante el primer trimestre de este año la caída del PIB fue de 5,2% y en el segundo trimestre de 1,9%. Son 6 trimestres seguidos de contracción.
Los analistas estiman que la reducción del PIB en 2010 estará en el horizonte de 2%. Ello acontece mientras todos los demás países de América Latina registrarán tasas positivas, la mayoría superiores a 4%, con la excepción de Ecuador y Nicaragua que a duras apenas crecerán. Estos dos últimos países son miembros de esa entelequia llamada ALBA y que es dirigida por Cuba y Venezuela.
En 2010, Venezuela ha disfrutado de una significativa recuperación del precio internacional del petróleo, lo cual no ha evitado su pésimo desempeño económico. También se hubiera podido beneficiar de aumentos importantes en otros de sus productos tradicionales de exportación como el acero y el aluminio, pero el problema ha sido que el gobierno de Hugo Chávez se las ha arreglado para acabar con las empresas productoras de estas materias primas. Actualmente Venezuela sólo exporta petróleo y sus derivados.
A comienzos 2010 el ministro de Planificación Jorge Giordani pronosticó que el crecimiento de este año sería de 4%. Por enésima vez este personaje se pifió en sus proyecciones. Cuando acierte en una habrá que hacer fiesta.
Al tiempo que la economía se contrae, la inflación en Venezuela bordea el 27% anual, no obstante un rígido control de precios. La gran mayoría de los países de América Latina tienen actualmente inflaciones de un dígito. Sólo Argentina coquetea con una hiperinflación cercana a la de Venezuela, pero allí el aumento del PIB es superior a 7%.
Los analistas estiman que la reducción del PIB en 2010 estará en el horizonte de 2%. Ello acontece mientras todos los demás países de América Latina registrarán tasas positivas, la mayoría superiores a 4%, con la excepción de Ecuador y Nicaragua que a duras apenas crecerán. Estos dos últimos países son miembros de esa entelequia llamada ALBA y que es dirigida por Cuba y Venezuela.
En 2010, Venezuela ha disfrutado de una significativa recuperación del precio internacional del petróleo, lo cual no ha evitado su pésimo desempeño económico. También se hubiera podido beneficiar de aumentos importantes en otros de sus productos tradicionales de exportación como el acero y el aluminio, pero el problema ha sido que el gobierno de Hugo Chávez se las ha arreglado para acabar con las empresas productoras de estas materias primas. Actualmente Venezuela sólo exporta petróleo y sus derivados.
A comienzos 2010 el ministro de Planificación Jorge Giordani pronosticó que el crecimiento de este año sería de 4%. Por enésima vez este personaje se pifió en sus proyecciones. Cuando acierte en una habrá que hacer fiesta.
Al tiempo que la economía se contrae, la inflación en Venezuela bordea el 27% anual, no obstante un rígido control de precios. La gran mayoría de los países de América Latina tienen actualmente inflaciones de un dígito. Sólo Argentina coquetea con una hiperinflación cercana a la de Venezuela, pero allí el aumento del PIB es superior a 7%.