En mayo de 2012 el aumento fue de 0.9% frente a igual mes del año anterior. Sin vehículos automotores y motocicletas el crecimiento fue de 4%.
Este último renglón, el de vehículos, experimentó un descenso interanual en mayo de 10,2%. Otro renglón que ha venido desacelerándose en los últimos meses, el de electrodomésticos y muebles para el hogar, registró un incremento interanual de 3,6%. Ambos rubros fueron los que impulsaron el boom del comercio al por menor durante finales de 2010 y a lo largo de 2011, conjuntamente con el de equipo de informática.
Pero en el caso de equipo de informática, el boom continúa. Su crecimiento interanual en mayo fue de 17,5%. Igualmente hubo otros subsectores de destacado dinamismo, como por ejemplo calzado y artículos de cuero (+11%), licores y cigarrillos (+10,2%), ferretería y pinturas (+9,4%), aseo personal y cosméticos (+8,3%), y textiles y confecciones (+8,2%).
A pesar de los reducidos aumentos de los últimos meses, la variación acumulada anual (últimos doce meses a mayo frente a los doce meses anteriores) del comercio minorista es un no despreciable 6%. Todavía es temprano para concluir que su tasa de aumento se estabilizará entre un 4% a 6% anual, que resulta razonable luego del gran rebote que se presentó después de la crisis de 2009.
Por ahora la estabilización de dicho crecimiento coincide con menores variaciones positivas en el crédito de consumo (de variaciones anuales de 25% se ha pasado a unas cercanas a 20%) y con un incremento en la tasa de interés para este tipo de crédito. Esta última se ha elevado de 18.4% efectiva anual hace un año a 20,3% actualmente.
Hacia delante se espera que se frenará el ciclo de aumento en las tasas de interés como resultado de la desaceleración de la economía global. Sin embargo, por otro lado, la fortaleza del peso ya no está tan garantizada como en el pasado si se tiene en cuenta la caída de los precios internacionales de los principales productos de exportación, y muy especialmente del petróleo, así como un previsible eventual retraimiento de las economías clientes de Colombia y de los flujos de inversión extranjera.
Si se mira la evolución de las series del comercio minorista se encuentran grandes similitudes entre mediados de 2008 y mediados de 2012. En ambos momentos se presentó una desaceleración luego de elevadas tasas de crecimiento en el año inmediatamente anterior. En 2008, la desaceleración se convirtió en contracción debido principalmente a la profundidad de la crisis de la economía global en ese entonces. En 2012, podría repetirse el mismo escenario si se agudiza la actual crisis global, lo cual a nuestro modo de ver luce como mas probable que improbable.
(Advertencia: lanota.com sólo utiliza este nombre. No tiene relación alguna con portales o empresas que emplean la palabra lanota en otras combinaciones de nombres).
Pero en el caso de equipo de informática, el boom continúa. Su crecimiento interanual en mayo fue de 17,5%. Igualmente hubo otros subsectores de destacado dinamismo, como por ejemplo calzado y artículos de cuero (+11%), licores y cigarrillos (+10,2%), ferretería y pinturas (+9,4%), aseo personal y cosméticos (+8,3%), y textiles y confecciones (+8,2%).
A pesar de los reducidos aumentos de los últimos meses, la variación acumulada anual (últimos doce meses a mayo frente a los doce meses anteriores) del comercio minorista es un no despreciable 6%. Todavía es temprano para concluir que su tasa de aumento se estabilizará entre un 4% a 6% anual, que resulta razonable luego del gran rebote que se presentó después de la crisis de 2009.
Por ahora la estabilización de dicho crecimiento coincide con menores variaciones positivas en el crédito de consumo (de variaciones anuales de 25% se ha pasado a unas cercanas a 20%) y con un incremento en la tasa de interés para este tipo de crédito. Esta última se ha elevado de 18.4% efectiva anual hace un año a 20,3% actualmente.
Hacia delante se espera que se frenará el ciclo de aumento en las tasas de interés como resultado de la desaceleración de la economía global. Sin embargo, por otro lado, la fortaleza del peso ya no está tan garantizada como en el pasado si se tiene en cuenta la caída de los precios internacionales de los principales productos de exportación, y muy especialmente del petróleo, así como un previsible eventual retraimiento de las economías clientes de Colombia y de los flujos de inversión extranjera.
Si se mira la evolución de las series del comercio minorista se encuentran grandes similitudes entre mediados de 2008 y mediados de 2012. En ambos momentos se presentó una desaceleración luego de elevadas tasas de crecimiento en el año inmediatamente anterior. En 2008, la desaceleración se convirtió en contracción debido principalmente a la profundidad de la crisis de la economía global en ese entonces. En 2012, podría repetirse el mismo escenario si se agudiza la actual crisis global, lo cual a nuestro modo de ver luce como mas probable que improbable.
(Advertencia: lanota.com sólo utiliza este nombre. No tiene relación alguna con portales o empresas que emplean la palabra lanota en otras combinaciones de nombres).