El gobierno de Venezuela le prohibió a los medios de comunicación referirse a este tema so pena de cárcel. Razón por demás para hacerlo.
Se trata de un espectáculo que sólo se da en países atrasados y sin mayor cultura económica. Como un patético inquisidor, Hugo Chávez salió a la cacería de supuestos especuladores cambiarios. Según Chávez, ellos son los culpables de la devaluación del bolívar. Las absurdas políticas que ha implementado su gobierno, y que han llevado a una dramática escasez de dólares, no tienen nada que ver la pérdida de valor del bolívar.
Lo cierto es que el dólar paralelo (o antiguo dólar permuta) y que ahora es el dólar negro (o dólar prohibido), se situó el 17 de mayo de 2010 en 8.36 bolívares para su compra. Ya casi dobla a la tasa oficial petrolera de 4.30 bolívares. Entre más rabietas de Chávez, entre más amenazas y persecuciones a los cambistas, mayor la devaluación.
Estos cambistas le daban algo de oxígeno a un mercado completamente regulado y que es insuficiente para atender la demanda de dólares del sector productivo y de los venezolanos en general. La culpa de la escasez de dólares es exclusivamente del gobierno, que tiene a Venezuela con una inflación galopante y al borde de la bancarrota.
Como están las cosas, el mejor ahorro para los venezolanos es comprar dólares y guardarlos debajo del colchón. Pero, ¡ojo! Hay que hacerlo a escondidas, sin mencionar la palabra “dólar” en público.
Se puede ahorrar en monedas distintas al dólar, con la seguridad de que cualquiera de ellas se valorizará más que el bolívar "fuerte". Sin embargo, por ahora es mejor mantenerse alejado del euro dado que actualmente pasa por un muy mal momento. Mejor que varias otras monedas, el peso colombiano. Últimamente ha estado más fuerte que el dólar.
Lo cierto es que el dólar paralelo (o antiguo dólar permuta) y que ahora es el dólar negro (o dólar prohibido), se situó el 17 de mayo de 2010 en 8.36 bolívares para su compra. Ya casi dobla a la tasa oficial petrolera de 4.30 bolívares. Entre más rabietas de Chávez, entre más amenazas y persecuciones a los cambistas, mayor la devaluación.
Estos cambistas le daban algo de oxígeno a un mercado completamente regulado y que es insuficiente para atender la demanda de dólares del sector productivo y de los venezolanos en general. La culpa de la escasez de dólares es exclusivamente del gobierno, que tiene a Venezuela con una inflación galopante y al borde de la bancarrota.
Como están las cosas, el mejor ahorro para los venezolanos es comprar dólares y guardarlos debajo del colchón. Pero, ¡ojo! Hay que hacerlo a escondidas, sin mencionar la palabra “dólar” en público.
Se puede ahorrar en monedas distintas al dólar, con la seguridad de que cualquiera de ellas se valorizará más que el bolívar "fuerte". Sin embargo, por ahora es mejor mantenerse alejado del euro dado que actualmente pasa por un muy mal momento. Mejor que varias otras monedas, el peso colombiano. Últimamente ha estado más fuerte que el dólar.