Tanto las tasas de captación como las de colocación siguen al alza, no obstante que el Banco de la República ha mantenido inalterada su tasa de intervención.
A comienzos de noviembre de 2011 la tasa de captación a 180 días era de 5,40% frente a 4,97% hace tres meses y 3,87% hace un año. A su vez, la tasa del crédito ordinario se situó en 11,51% anual frente a 11,32% hace tres meses y 9,26% hace un año. Y la del crédito de consumo en 18,68% anual frente a 18,25% hace tres meses y 16,59% hace un año.
La explicación principal de este comportamiento probablemente reside en las crecientes expectativas de inflación. En octubre la inflación al consumidor superó 4% anual que es el tope de la meta oficial para este año, mientras que el aumento de los precios al productor se aproximó a 8% anual.
A lo anterior se agregan unas expansiones desbordadas de la liquidez: los medios de pago (M1) crecían a comienzos de noviembre en 17,3% anual y la liquidez ampliada (M3) lo hacía en 17,4% anual, muy por encima del aumento del PIB nominal que estaría por los lados de 9,5% anual.
La cartera del sistema financiero, si bien no muestra todavía signos de deterioro porque la economía se encuentra en lo que pudiera llamarse la etapa “de los gozosos” del actual ciclo expansivo monetario y financiero, ha venido creciendo a un insostenible 21-23% anual durante cerca de nueve meses.
De mantenerse por uno o dos semestres más este alegre comportamiento monetario y financiero se estaría en camino hacia una economía con inflaciones superiores a 7% anual y con burbujas en varios frentes de la actividad económica. Es indudable que las autoridades gubernamentales se la están jugando a que el previsible deterioro de la economía global en 2012 actúe como la principal fuerza moderadora de la calentura que empieza a afectar a la economía colombiana.
(Advertencia: lanota.com sólo utiliza este nombre. No tiene relación alguna con portales o empresas que emplean la palabra lanota en otras combinaciones de nombres).
La explicación principal de este comportamiento probablemente reside en las crecientes expectativas de inflación. En octubre la inflación al consumidor superó 4% anual que es el tope de la meta oficial para este año, mientras que el aumento de los precios al productor se aproximó a 8% anual.
A lo anterior se agregan unas expansiones desbordadas de la liquidez: los medios de pago (M1) crecían a comienzos de noviembre en 17,3% anual y la liquidez ampliada (M3) lo hacía en 17,4% anual, muy por encima del aumento del PIB nominal que estaría por los lados de 9,5% anual.
La cartera del sistema financiero, si bien no muestra todavía signos de deterioro porque la economía se encuentra en lo que pudiera llamarse la etapa “de los gozosos” del actual ciclo expansivo monetario y financiero, ha venido creciendo a un insostenible 21-23% anual durante cerca de nueve meses.
De mantenerse por uno o dos semestres más este alegre comportamiento monetario y financiero se estaría en camino hacia una economía con inflaciones superiores a 7% anual y con burbujas en varios frentes de la actividad económica. Es indudable que las autoridades gubernamentales se la están jugando a que el previsible deterioro de la economía global en 2012 actúe como la principal fuerza moderadora de la calentura que empieza a afectar a la economía colombiana.
(Advertencia: lanota.com sólo utiliza este nombre. No tiene relación alguna con portales o empresas que emplean la palabra lanota en otras combinaciones de nombres).