En el primer trimestre de 2009, la contracción del PIB fue de 0,6% frente al mismo período del año anterior, lo que sorprendió a los más pesimistas.
Sin embargo, el PIB del último trimestre de 2008 fue revisado a la baja, de –0,7% a –1,0%. La principal contracción tuvo lugar en los sectores de la industria y del comercio (–7,9% y –2,8%, respectivamente). Por el lado opuesto, los sectores que más crecieron fueron minería (10,6%), intermediación financiera (7,9%) y construcción (4,1%).
El sector de la minería fue jalonado por petróleo y gas natural (11,5%) y por minerales metálicos (32,7%). El desempeño de este último subsector fue influenciado por Cerromatoso, la extractora de níquel: el crecimiento de la producción de este mineral fue de 68,3% en razón a que la base de comparación es con el primer trimestre de 2008, cuando los trabajadores de esa empresa hicieron huelga.
En el caso de la construcción, el crecimiento en el valor agregado de obras civiles fue de 21,2% y la disminución de edificaciones de 14,1%. En cuanto a las obras civiles, el mayor dinamismo fue en construcciones para la minería (93,5%) y en puertos y represas (54,6%). Pero el renglón de carreteras, calles, caminos y puentes presentó una disminución, lo que permite cuestionar la aseveración de que la política anti cíclica del gobierno está en plena ejecución.
Otros subsectores que crecieron: ganadería (4,2%), productos de la pesca (3,9%), servicios a las empresas (3,6%), servicios inmobiliarios y alquiler de vivienda (3,1%), energía eléctrica (3%) y servicios de enseñanza (3%).
Y subsectores importantes que decrecieron: productos del café (–17,3%), servicios de hotelería y restaurantes (-2,9%), servicios de asistencia social y salud (–2,3%), agricultura sin café (–1,7%), servicios de transporte terrestre (–1,1%), y servicios de correo y telecomunicaciones (–0,8%). En lo que respecta a los servicios de administración pública la variación fue de cero.
El sector de la minería fue jalonado por petróleo y gas natural (11,5%) y por minerales metálicos (32,7%). El desempeño de este último subsector fue influenciado por Cerromatoso, la extractora de níquel: el crecimiento de la producción de este mineral fue de 68,3% en razón a que la base de comparación es con el primer trimestre de 2008, cuando los trabajadores de esa empresa hicieron huelga.
En el caso de la construcción, el crecimiento en el valor agregado de obras civiles fue de 21,2% y la disminución de edificaciones de 14,1%. En cuanto a las obras civiles, el mayor dinamismo fue en construcciones para la minería (93,5%) y en puertos y represas (54,6%). Pero el renglón de carreteras, calles, caminos y puentes presentó una disminución, lo que permite cuestionar la aseveración de que la política anti cíclica del gobierno está en plena ejecución.
Otros subsectores que crecieron: ganadería (4,2%), productos de la pesca (3,9%), servicios a las empresas (3,6%), servicios inmobiliarios y alquiler de vivienda (3,1%), energía eléctrica (3%) y servicios de enseñanza (3%).
Y subsectores importantes que decrecieron: productos del café (–17,3%), servicios de hotelería y restaurantes (-2,9%), servicios de asistencia social y salud (–2,3%), agricultura sin café (–1,7%), servicios de transporte terrestre (–1,1%), y servicios de correo y telecomunicaciones (–0,8%). En lo que respecta a los servicios de administración pública la variación fue de cero.
El ministro de Hacienda Oscar Iván Zuluaga puso en duda de que la economía colombiana estuviera en recesión. Lo cierto es que dos trimestres de caída en el PIB son una recesión. Pero, además, todos los indicadores apuntan a que en el segundo trimestre de 2009 también hubo una disminución. Por el lado de la industria, del comercio, de la edificación urbana, del café y del transporte, no se ven todavía señales de reactivación, sino antes bien de desaceleración adicional. A su vez, la tendencia del consumo de hogares es comprometedora: su descenso en el primer trimestre de este año fue de 0,6% frente al mismo período de 2008, y de 0,5% frente al último trimestre de ese año.
Las mayores dudas surgen en relación con lo que sucederá en el segundo semestre de 2009. No sobra reiterar que ello dependerá en buena medida de la evolución económica global y de las economías regionales. En este sentido, los indicios no son del todo alentadores, no obstante que se escuchan augurios de una eventual reactivación y que la economía colombiana se ha mostrado relativamente fuerte a la hora de aguantar el chaparrón.
Las mayores dudas surgen en relación con lo que sucederá en el segundo semestre de 2009. No sobra reiterar que ello dependerá en buena medida de la evolución económica global y de las economías regionales. En este sentido, los indicios no son del todo alentadores, no obstante que se escuchan augurios de una eventual reactivación y que la economía colombiana se ha mostrado relativamente fuerte a la hora de aguantar el chaparrón.